La Lic. Alejandra Torrico Sengoku, Fisioterapeuta Kinesióloga, nos hace llegar este articulo, importante para los que realizamos alguna actividad física ya sea en casa, en el gym o al aire libre y no estamos libres de sufrir, en algún momento, alguna lesión.
Sabías que la fisioterapia y la kinesiología trabajan de la mano para ayudarte a recuperar tus lesiones, pero también ayudarte a prevenirlas.
La etapa preventiva es fundamental, si bien el cuerpo humano es complejo requiere de activar y estimular ciertos sistemas, receptores, etc., para evitar lesionarnos y si sucediera que sea en lo más mínimo, para ello la fisioterapia deportiva esta direccionada a crear entrenamientos o preparar el cuerpo humano a la actividad física, el deporte y actividades de la vida diaria.
La labor asistencial del fisioterapeuta es más que conocida: atender a sujetos que han sufrido una lesión y ayudarlos a recuperar las capacidades, intentando, en la medida de lo posible, regresar a un estado similar al existente antes de la lesión.
Sin embargo, la labor preventiva de la fisioterapia deportiva es una herramienta eficaz para, precisamente, reducir el riesgo de que esas lesiones ocurran y, en el caso de que ocurran, que sean de menor gravedad. Así que vamos a exponer los puntos clave de la prevención de lesiones desde la fisioterapia:
- La labor preventiva de la fisioterapia consiste en controlar los factores de riesgo que predisponen a lesiones. Dependiendo del deporte o ejercicio y de las características de la persona, el fisioterapeuta debe conocer mecanismos o gestos típicos que producen lesión para saber cómo se puede actuar para reducir el riesgo de lesión.
- Conocer las características del deportista es muy importante. Por ello la valoración fisioterápica debe ser amplia y recoger las carencias y limitaciones existentes, para poder trabajar y poner remedio. Por ejemplo: desequilibrios musculares, falta de fuerza, mala higiene postural durante la actividad deportiva, error en el gesto deportivo…
- La existencia de lesiones previas en muchos casos puede ser un factor de riesgo para sufrir recaídas. Puede ser por tratamiento inadecuado (o porque no se haya tratado), o bien porque la zona haya quedado débil o poco preparada para realizar esfuerzos. Por ello es importante hacer entrenamiento específico y recuperar la zona lesionada más allá de simplemente recuperar la movilidad y que no haya dolor. El entrenamiento de tipo propioceptivo y la readaptación al esfuerzo son claves.
- Entrenamiento de tipo funcional, con elementos de desequilibrio y que se centren en entrenar el control de movimientos ayuda a que el cuerpo esté más preparado para responder a esfuerzos, desequilibrios e imprevistos.
- El entrenamiento preventivo no es solo para deportistas de élite. Detectar desequilibrios musculares, alteraciones posturales, gestos erróneos o problemas de higiene postural es útil y necesario también en deportistas aficionados; incluso es posible adaptarlo para los esfuerzos cotidianos (tareas de casa, trabajo…).
- Movimientos repetitivos y micro-traumatismos pueden ser origen de problemas. Por ejemplo, gestos con el ratón o teclado del ordenador, por ello los cuidados preventivos son útiles para un sector amplio de la población (no solo en el deporte).
Por ello, acudir al fisioterapeuta sin estar lesionado puede ser útil, precisamente para seguir manteniendo la salud y esquivar las lesiones.
Aunque quiero dejar claro que la intención de esta entrada no es medicar a todo el mundo y pensar que es necesario acudir al fisioterapeuta sin tener ningún problema de salud, pero si realizas un trabajo que requiera esfuerzo físico, o bien esfuerzos pequeños pero repetidos, o entrenas de una forma intensa, juegas partidos ocasionales con los amigos… Es posible que una visita temprana al fisioterapeuta para realizar un poco de fisioterapia preventiva te ahorre algún que otro disgusto ¿Qué opinas del tema?
LIC. ALEJANDRA TORRICO SENGOKU
Fisioterapeuta Kinesióloga
ARMONIZATE BOLIVIA
Centro de Fisioterapia y Kinesiología / Medicina Integrativa